La semana pasada llegó este interesante libro a la clase en el que nos sorprenió lo grande que puede ser una ballena azul, en comparación con otros objetos o personas.
En el libro aparecía que este animal puede llegar a medir 30 METROS de largo y entonces empezó el debate: ¿eso cuánto es? ¿más grande que un coche? ¿o qué una casa? ¿más grande de la clase?...
Como ya hemos trabajado la MEDIDA en otras ocasiones, y al ver que no nos poníamos de acuerdo, los niños y niñas llegaron rápidamente a la conclusión que lo mejor sería utilizar el metro, "así ya no nos podemos equivocar". Y surgió entonces el primer problema: necesitábamos 30 metros y sólo teníamos 28 en la clase, así que nos faltaban dos.... Sin problema, nos los prestó la seño Rocío... ¡ya tenemos los 30 metros!
Segundo problema que surge: en la clase no cambían los 30 metros al ponerlos uno tras otro, así que tenemos que buscar un lugar más grande. Tampoco hay problema.... ¡nos vamos al patio!
Ya en el patio, primero hicimos estimaciones de dónde cada uno creíamos que podía llegar una ballena azul tomando como referencia la pared del cole: Marta dijo "hasta aquí", Pablo "no, yo creo que hasta aquí" y así sucesivamente el resto de los niños.
Ya solo nos quedaba comprobar cómo era en realidad de larga la ballena azul y fuimos colcando nuestros 30 metros, uno tras otro, hasta completar la medida que necesitábamos.
Y por supuesto, no nos quedó otra cosa que decir al comprobarlo.... "OOOOOHHHHHH, PUES SI QUÉ GRANDES SON LAS BALLENAS AZULES!